Las ´Zonas M´ se ajustarán de nuevo a la edificabilidad prevista en el Plan General de 1998
JOSEP CAPÓ. PALMA.
Todas las parcelas situadas en los polígonos industriales deberán ajustar su edificabilidad y la altura máxima permitida a la prevista en el Plan General de Ordenación Urbana de 1998. De esta forma, la "exoneración" del cumplimiento de estos parámetros urbanísticos, aprobada en 2004 para las denominadas Zonas M de los polígonos, en suspenso desde el pasado mes de junio, será permanente cuando se haya aprobado la modificación puntual del planeamiento que el equipo de gobierno está promoviendo.Si bien todas las parcelas quedarán sujetas a los parámetros urbanísticos del Plan General de 1998 o, en su caso, de los planes parciales aprobados, la modificación en trámite también incluirá una ficha que aclarará los usos permitidos en cada parcela. De esta forma, según la concejala Yolanda Garví, con carácter general, todos los solares deberán destinar un mínimo del 55% de su edificabilidad al uso principal industrial o de servicios de logística, que incluye los de almacenamiento y taller. El 45% de la edificabilidad restante podrá utilizarse para usos denominados secundarios, entre los que se incluye el administrativo, de establecimiento público, comercial y de equipamientos.Asimismo, si un propietario quiere destinar en exclusiva un solar a un uso secundario, podrá hacerlo, aunque sólo podrá construir el 45% de la edificabilidad permitida.De esta forma, desde el departamento de Urbanismo se pretende que los polígonos puedan continuar prestando unos servicios que son considerados "estratégicos" para una comunidad en la que la principal actividad es la turística y de servicios. No obstante, al mismo tiempo, se pretende garantizar el que el suelo industrial cumpla con su función original, incluyendo también los usos de almacenaje y de talleresSegún Garví, la modificación promovida en 2001 y aprobada definitivamente en 2004, que exoneraba del cumplimiento de determinados parámetros urbanísticos en las denominadas zonas M de los polígonos, se hizo sin disponer de ningún estudio de necesidades. De hecho, según el encargado con motivo de las suspensión cautelar de la concesión de licencias, se ha comprobado que en estos momentos está disponible la mitad de la edificabilidad posible en los polígonos industriales. Además, el suelo vacante –superficie de parcelas sin construir– es de entre el 25% y el 30%. En estas condiciones, Urbanismo mantiene que la modificación de 2004 era "innecesaria" si se quería justificar por la necesidad de disponer de más suelo industrial y, en realidad, fue contraproducente, puesto que supuso un incremento desmesurado de los precios por metro cuadrado al triplicar y hasta cuadruplicar en algunos casos la edificabilidad inicialmente permitida. La modificación del Plan General mantendrá los derechos adquiridos por los propietarios de las aproximadamente 100 licencias concedidas mientras ha estado en vigor la ausencia de limitación.
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