F.G. PALMA Pedro Mesquida presenta su candidatura a la presidencia de Afedeco tras ocho años como número 2 en esta patronal y cuatro ejercicios al frente de la fundación Ibi Comerç.
El que ha sido vicepresidente de la patronal balear de comercio durante dos legislaturas ha optado por aspirar a ponerse al frente de la misma.
—¿Qué le ha llevado a la carrera por la presidencia de Afedeco?
—Opino que es necesario un cambio generacional y de ideas. Tras ocho años, una persona queda un poco quemada por el esfuerzo que ha tenido que hacer y es bueno que haya una renovación. Si gano las elecciones, me comprometo a estar un máximo de dos mandatos.
—¿Cuáles son las causas de su distanciamiento con Bartolomé Servera?
—Yo soy partidario del trabajo en equipo, y me presento con cuatro vicepresidencias que disfrutarán de una gran autonomía. El equipo de trabajo que existía en torno a Servera desapareció hace tres años y las decisiones se estaban tomando de una manera excesivamente personal.
—¿Qué postura mantiene ante el experimento del centro de Palma de abrir los festivos del verano?
—Si alguien pretende aplicarlo en mas sitios, mi respuesta será tajante: no. No voy a respaldar intentos de aniquilar el comercio mallorquín, y la liberalización total del sector equivaldría a su asesinato. No hay que olvidar que el comercio es el gran dinamizador de las ciudades, y es absurdo pretender que pequeñas empresas abran todos los días, por una simple cuestión de falta de personal. Defiendo la prueba piloto de Palma, pero estoy dispuesto a adoptar medidas rotundas si se intenta ir más allá.
—¿Defiende cambios en la regulación de las rebajas?
—Se están registrando cambios en todos los aspectos y nos estamos encontrando con que la mayoría de los clientes solo compran en rebajas. Hasta el clima de las islas está cambiando, y si en noviembre la gente todavía va a la playa, es absurdo que empecemos a vender ropa de verano con descuento en julio. En mi opinión, deberíamos adelantar las rebajas de invierno, para incentivar el que las familias isleñas con problemas económicos puedan hacer sus compras navideñas, y retrasar las de verano, y así poder aprovechar el consumo que realizan los turistas.
—¿Hay fórmulas para incentivar el consumo?
—Se puede apostar por dinamizar las zonas comerciales, que cuesta muy poco. Y desde luego no ayuda nada el que manteros que venden imitaciones puedan campar a sus anchas.
—¿El sector ha tocado fondo en el cierre de tiendas?
—Ya se ha hecho una gran criba, pero por desgracias ésta no ha concluido. Muchos establecimientos aguantarán hasta después del verano, pero el próximo invierno volverá a ser muy duro. Afortunadamente, los que van quedando son los más especializados y los más fuertes.
—¿Qué medidas se pueden tomar para ayudar a las zonas comerciales?
—Entre mis planes está el recuperar la campaña para que comercios y locales de restauración abran todos los sábados por la tarde. Y quiero poner en marcha una iniciativa que ha triunfado en Estados Unidos, que consistiría en que el último viernes de abril y de noviembre todas las tiendas estén abiertas hasta las 12 o la 1 de la noche con descuentos para sus clientes, para que el ciudadano pueda salir de tapas y al mismo tiempo hacer compras.
—¿Qué estrategia va a seguir ante el nuevo Govern y sus pretensiones liberalizadoras?
—El primer paso será el diálogo, con una actitud negociadora y no beligerante, porque el objetivo inicial es aproximar posturas. Pero una advertencia: si nos tenemos que poner duros, lo haremos.
—¿Como definiría las relaciones de Afedeco con otras organizaciones empresariales?
—Están deterioradas y es imprescindible mejorarlas. Hemos de conseguir el apoyo de la Caeb y de la Cámara de Comercio, y limar las asperezas que se han generado durante el mandato de Bartolomé Servera.
—¿Será posible desbloquear la negociación del convenio de su sector?
—Esta es una cuestión extremadamente preocupante y por eso me gustaría mantener una reunión urgente con las demás asociaciones de comercio para poder consensuar una nueva propuesta para los sindicatos que tengo en mente. Creo que el resultado sería positivo.
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