Las ventas no dan los ingresos esperados a los comercios minoristas en el primer sábado de rebajas
C. CANALS. PALMA.
El relato coincide: ha habido "mucha animación, mucha gente en la calle y los comercios", de manera que se han producido más visitas que en los oscuros meses anteriores y las cajas registradoras han cantado en consecuencia, según sintetiza el presidente de la patronal de comerciantes Pimeco, Bernat Coll.Pero este "optimismo moderado" se acaba aquí: en absoluto el volumen de ventas se ha acercado al del año anterior. Y aunque sea "prematuro" extraer conclusiones –que Pimeco deja para la semana entrante–, se supone que las ventas de esta primera semana de rebajas –"la más importante", se recuerda– no bastarán para recuperar una temporada triste.La segunda patronal, Afedeco, calcula que el volumen de la caja puede haber disminuido "entre un 20 y un 30 por ciento" respecto del año anterior, tras haber consultado los resultados de una quincena de comercios asociados."El tiempo acompañaba, estaba nublado" y los veraneantes se desplazaban a Palma para comprar. Y "compraban, pero no gastaban" al gusto de los comerciantes. El vicepresidente de Afedeco, Pere Pau Mersquida, resumió la jornada en un viejo refrán: "Mucho ruido y pocas nueces". Las grandes superficies, en cambio, señalaron que esperaban cerrar la jornada "con cifras ligeramente superiores a las del año pasado", gracias en parte a los pasajeros de dos grandes cruceros en Palma.
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